EL 50% DE LAS PERSONAS CIEGAS POR DIABETES NUNCA ACUDIERON AL OFTALMÓLOGO
  • Así lo constata el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla coincidiendo con la celebración del Día Mundial de la Diabetes
  • Actualmente tan sólo el 20-30% de los diabéticos realiza una revisión anual para descartar posibles enfermedades de la visión
  • Aunque a día de hoy la retinopatía diabética es la primera causa de ceguera irreversible en edad laboral es también una afección ocular evitable si se logra detectar y tratar a tiempo 
  • La clínica cuenta con una Unidad especializada  de Diabetes Ocular en la que se hace un seguimiento específico y personalizado a los pacientes con retinopatía diabética 
  • Esta enfermedad ocular supone al estado un coste superior a los 7.000 euros anuales por cada paciente con retinopatía diabética que padezca ceguera

 

Con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Diabetes que se celebra hoy, día 14 de noviembre, en todo el mundo bajo el lema oficial ‘Ojo con la Diabetes’, el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla informa de que el  50% de las personas ciegas por diabetes nunca acudieron al oftalmólogo y que tan solo el 20-30% de los diabéticos se somete a una revisión anual de retina para detectar enfermedades visuales vinculadas a esta enfermedad que puede conducir a la ceguera si no se trata a tiempo.

Se estima que la retinopatía diabética es la primera causa de ceguera irreversible en edad laboral, afectando a más de 70.000 gallegos. Según el informe de la ONCE de 2012, fue la sexta causa de afiliación en Galicia, habiendo un total de 261 personas afiliadas a esta Organización por ceguera legal originada por esta patología ocular.

“A pesar de ser la primera causa de ceguera irreversible en edad laboral, curiosamente la retinopatía diabética es también una afección visual evitable si se logra detectar y tratar a tiempo, logrando evitar la pérdida grave de visión en la mayoría de los casos”, explica el director médico del Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla, el Prof. Francisco Gómez-Ulla.

 

Unidad especializada de diabetes ocular

Para poder hacer un seguimiento específico y personalizado de los pacientes con retinopatía diabética, el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla cuenta con una unidad especializada de diabetes ocular conformada por un equipo de profesionales expertos en esta patología y tecnología de vanguardia para poder diagnosticarla y tratarla.

Además, conscientes de la importancia del diagnóstico precoz para prevenir la ceguera evitable, la clínica ha decidido salir a la calle el Día Mundial de la Diabetes, en colaboración con la Asociación Compostelana de Diabéticos, para realizar controles de glucemia y exploraciones de fondo de ojo a todas las personas que lo deseen.

El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla pone así su cuadro médico y los medios tecnológicos más avanzados al servicio de la ciudadanía para descartar posibles casos de retinopatía diabética entre los ciudadanos que se detecte sospechas de padecer diabetes en las pruebas de glucemia capilar que realicen.

 

¿Por qué la diabetes daña la visión?

La retinopatía diabética afecta a la retina de los pacientes que tienen diabetes, haciendo que los vasos sanguíneos que suministran sangre a la retina se lesionen por el alto nivel de azúcar, volviéndose frágiles. Esto provoca edema o hemorragias que derivan en pérdida de agudeza visual. Tanto las personas con diabetes tipo 1 como con diabetes tipo 2 están en riesgo de padecer esta afección, siendo cuatro veces más frecuente en los diabéticos tipo 1.

 “Los riesgos de desarrollar retinopatía diabética se incrementan con el paso del tiempo. Debemos tener en cuenta que el 23% de los pacientes desarrollarán esta patología tras 5 años con diabetes, el 60% la padecerán a los 10 años y el 80%, a los 15 años”, explica el Prof. Francisco Gómez-Ulla. De hecho una persona con diabetes tiene un 50% más de probabilidades de padecer complicaciones asociadas a la visión en un periodo de 10 años.

 

Costes de la ceguera por diabetes

La retinopatía diabética implica un coste superior a los 7.000 euros anuales por paciente con retinopatía diabética que padezca ceguera, asociado a la pérdida de productividad. Además del coste económico, la ceguera tiene una serie de implicaciones sociales que transcienden más allá de su propia discapacidad como son la depresión, la dificultad para llevar una vida normal, la falta de adaptaciones en los puestos de trabajo y la dificultad para incorporarse al mercado laboral.

 

Síntomas de la enfermedad diabética en el ojo

Aunque la retinopatía diabética puede pasar inadvertida hasta una fase muy avanzada de la enfermedad porque sus síntomas pueden ser imperceptibles, los más frecuentes son: visión borrosa o con manchas, distorsión de la imagen, dificultad para leer o ver de cerca y pérdidas graves de agudeza visual en caso de hemorragias masivas.

Las técnicas más  empleadas para tratar la retinopatía diabética son la inyecciones intraoculares, la fotocoagulación láser (si no hay hemorragia en el humor vítreo) especialmente con los nuevos láseres que son menos dañinos para  la retina, y la vitrectomía de mínima incisión y sin suturas, una cirugía ocular que se  usa para extraer el vítreo si hay mucha sangre en el espacio vítreo. Técnicas todas estas que se utilizan en el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla que es pionero en la introducción de las mismas en nuestra comunidad.

La retinopatía diabética es una enfermedad que se puede prevenir llevando un control estricto de las glucemias, lípidos plasmáticos, peso y tensión arterial; evitando el tabaco y el sedentarismo; y haciendo revisiones periódicas con el oftalmólogo.