SE ESTABLECE UNA NUEVA CLASIFICACIÓN DE LA DMAE PARA UN MEJOR DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

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  • Frente a la clasificación vigente en la que se reconocen dos formas, DMAE seca y húmeda, se fijan tres nuevos grados de lesiones en la DMAE húmeda que implican un diagnóstico y pautas terapéuticas distintas a las que se estaban aplicando actualmente
  • El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla ha comenzado ya a implementar esta nueva clasificación en la clínica a través de su Unidad de Mácula, Retina y Vítreo
  • La clínica ha puesto además en marcha una Campaña de Prevención de la DMAE para incidir en la importancia del diagnóstico para prevenir la ceguera
  • Esta enfermedad afecta en España a más de 800.000 personas y es la primera causa de ceguera en mayores de 50 años

 

Se han fijado nuevas formas de Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE), frente a la clasificación que se mantenía hasta el momento en la que sólo se contemplaban dos, húmeda y seca, para un tratamiento más preciso. Se establecen así, por parte de un grupo de expertos internacional, para la DMAE húmeda tres nuevos grados de lesiones que implican un diagnóstico y pautas terapéuticas distintas a las que se venían aplicando. Desde el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla se ha comenzado ya a implementar esta nueva clasificación a través de su Unidad de Mácula, Retina y Vítreo para adecuar así el diagnóstico y tratamiento actuales de sus pacientes de DMAE a estos cambios recientemente aprobados en el campo de la oftalmología.

“A partir de ahora se contemplará en la clasificación de la DMAE húmeda, lesiones neovasculares de tipo 1, de tipo 2 y de tipo 3, algo que es muy importante ya que determinará la pauta terapéutica más adecuada para cada paciente, avanzando así hacia un tratamiento cada vez más individualizado», explica el especialista en mácula, retina y vítreo del Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla, el Dr. Maximino Abraldes.

Desde la clínica se recuerda que la DMAE húmeda es menos frecuente pero más agresiva por la aparición de vasos anómalos que provocan una progresión rápida con pérdida de visión en la mayoría de los casos. La DMAE seca, por su parte, es la más frecuente y la menos agresiva, pero produce una disminución progresiva e irreversible de la visión a lo largo de los años.

  

La OCT y la OCT-A, claves para una mejor clasificación de la DMAE

Los nuevos sistemas de diagnóstico por imagen han contribuido a clasificar mejor la DMAE gracias a su gran precisión. La OCT (Tomografía de Coherencia Óptica) y la angiografía de OCT-A han revolucionado el diagnóstico de esta enfermedad que afecta ya en España a más de 800.000 personas y es la primera causa de ceguera en mayores de 50 años.  Razón por la que el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla ha sido pionero en España en incorporar ambas tecnologías.

“Entre las grandes ventajas de los nuevos sistemas de diagnóstico por imagen se encuentra el hecho de que son técnicas menos invasivas, frente a las que se usaban anteriormente en la exploración ocular como la Angiografía fluoresceínica y con Verde de Indocianina; que en pocos segundos permiten visualizar la red vascular de la retina en tres dimensiones y revisar sus diferentes capas y que, analizando las imágenes que ofrecen, permiten predecir el pronóstico visual del paciente”, indica el Dr. Abraldes.

El avance experimentado en el campo del diagnóstico a través de las nuevas tecnologías se espera que se traslade también en poco tiempo al campo del tratamiento con nuevos fármacos. “En breve dispondremos de dos nuevos medicamentos (Faricimab, en desarrollo, y Brolucizumab, ya aprobado para uso intraocular pero pendiente de comercialización en España), que nos van a permitir tratar la DMAE húmeda en sus diferentes tipos con un menor número de inyecciones intravítreas anuales ya que los diferentes estudios realizados ponen de manifiesto que se tratan de fármacos más potentes y de mayor duración que los actuales”, aclara el especialista en retina de la clínica. En lo que respecta a los avances en el tratamiento para la DMAE seca, en la actualidad sigue sin existir ningún fármaco aprobado para su aplicación, aunque la investigación llevada a cabo a nivel mundial es prometedora. El Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla ha participado y participa en todas estas investigaciones gracias a su Unidad especializada de Investigación y Ensayos Clínicos.

 

Su diagnóstico precoz evita que los efectos sobre la visión sean irreversibles

La DMAE es una enfermedad degenerativa que afecta a la zona central de la retina denominada mácula lo que causa la pérdida de la visión central. Es muy común en personas por encima de los 55 años, aumentando su incidencia con la edad, de ahí que sea la principal causa de ceguera legal en los países desarrollados por encima de esta edad.

El Dr. Abraldes recuerda que el incremento de la esperanza de vida y el envejecimiento de la población duplicarán su prevalencia en las próximas décadas, estimándose que en 2040 haya unos 280 millones de personas afectadas por esta enfermedad.

Para evitar que los efectos que la DMAE provoca sobre la visión sean irreversibles es fundamental detectar precozmente la enfermedad. Así, para concienciar sobre la importancia del diagnóstico precoz e incrementar su conocimiento entre la población, el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla ha puesto en marcha esta semana una Campaña de Prevención de la DMAE con la que busca dar a conocer esta enfermedad, así como sus síntomas de inicio.

Además del diagnóstico precoz, es imprescindible que el paciente mantenga un tratamiento continuado en el tiempo, a través de la aplicación de inyecciones intravítreas para evitar la ceguera a la que conduce esta enfermedad. “Desde el decreto del estado de alarma el pasado año, en el Instituto Oftalmológico Gómez-Ulla priorizamos a los pacientes con DMAE, haciendo un seguimiento exhaustivo de los mismos para evitar que dejasen de acudir a sus citas ya que no tratarse hace que los efectos de esta patología sobre la visión sean irreversibles, originando la ceguera”, señala.