Tal y como se recoge en el artículo publicado por Business Insider además del uso de gafas o lentes de contacto existen diferentes formas de mejorar la visión, muchas de ellas, de forma natural, relacionadas con el estilo de vida. A continuación se detallan seis de ellas:
- Tomar suficiente vitamina A. Es esencial para la vista porque ayuda a que la retina se comunique con el cerebro. Se recomienda comer tres porciones por semana de alimentos ricos en vitamina A para ayudar a prevenir enfermedades oculares que dañan la retina, como la degeneración macular.
- Dejar de fumar. Fumar puede disminuir la cantidad de oxígeno que llega a la retina y dañar los minúsculos vasos sanguíneos del ojo. Por tanto, fumar puede dañar la retina y causar degeneración macular, siendo el principal factor de riesgo modificable de esta enfermedad ocular.
- Utilizar gafas de sol. Se deben usar aquellas que filtren la luz UVA y UVB, buscando las etiquetas que indiquen la absorción de rayos ultravioleta de hasta 400 nm o bloqueo de rayos ultravioleta del 100%. Exponer la vista al sol sin protección puede dañar la córnea e incluso hacer que algunas personas desarrollen cánceres de piel en la delicada piel alrededor de los ojos y ocasionalmente en su superficie.
- Seguir la regla 20-20-20. Mirar las pantallas durante un tiempo prolongado puede generar una gran tensión en los ojos de ahí que se recomiende usar un método llamado regla 20-20-20 para reducir la fatiga visual. Cada 20 minutos debe tomarse un descanso y apartar la vista de la pantalla; durante ese descanso debe buscarse un objeto alejado para mirarlo y concentrarse en él durante al menos 20 segundos antes de volver a mirar a la pantalla.
- Emplear gafas protectoras. El equipo de protección es fundamental en trabajos con riesgo de sufrir lesiones oculares. De hecho se estima que usar protección ocular adecuada ayuda a prevenir el 90% de las lesiones oculares en el trabajo.
- Controlar los niveles de azúcar en sangre y la diabetes. La diabetes puede representar un riesgo grave para la vista ya que debilita los vasos sanguíneos de todo el cuerpo, incluidos los de la retina. Mantener controlados los niveles de azúcar en sangre, la presión arterial y el colesterol puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades oculares vinculadas con la diabetes como la retinopatía diabética o el edema macular diabético.
